Cuando empezamos a razonar sobre la forma en que razonamos, a desarrollar conceptos sobre la forma en que conceptualizamos y a definir las maneras en que construimos definiciones, nuestro pensamiento se hace cibernético. Cada acto mental o habilidad de razonamiento puede aplicarse a todos los demás....
Inesperadamente la psicología educativa ha descubierto la importancia de pensar sobre el pensamiento: de estudiar, controlar y revisar los propios procesos de pensamiento. Esto a su vez ha concentrado la atención sobre el papel educativo de los actos mentales (asumir, suponer, asentir, especular, hacer conjeturas), de los actos metacognitivos (saber lo que uno recuerda, asumir lo que uno sabe), de los actos meta-afectivos (deseas tener deseo, desear amar), y de los actos metales correspondientes (inferir que tú estás infiriendo).
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